Los sistemas de CCTV (Circuito Cerrado de Televisión) y control de acceso son componentes clave de la seguridad de un edificio o instalación, trabajando conjuntamente para proteger tanto a personas como a bienes.
El CCTV proporciona vigilancia visual mediante cámaras, mientras que el control de acceso regula quién puede entrar o salir de áreas específicas.